Cuando compramos una camisa, ¿sabemos realmente si nos queda bien?, ¿sólo con cerciorarnos de que más o menos es nuestra talla es suficiente?. Quizá necesitamos saber algo más, por ejemplo, que cada temporada cambian las “hechuras”, los cortes, las mangas pueden venir más largas, etc.
Lo primero que debes mirar es la talla. Pero me refiero a mirar que el tallaje sea el adecuado a tu fisonomía. Para ello debes abrochar el primer botón del cuello y asegurarte que como mucho puedes introducir media uña de tu dedo índice. Esto sobre todo es esencial para las camisas de vestir, la corbata será quién diga si ese cuello es grande o pequeño.
Otro aspecto importante son los costados, una camisa muy ancha u holgada nos jugará malas pasadas y a lo largo del día producirá ese efecto descamisado, algo que debemos evitar a toda costa, más aun si vamos de traje.
Hoy en día las camisas de vestir ya vienen con pinzas en la espalda, también llamado corte Slim Fit, Tailored fit, etc. Se ajustan más a la forma de la espalda y evitan ese “efecto sobrante” del que acabamos de hablar.
Lo ideal es que una camisa no sea ni demasiado larga, ni demasiado corta, lo primero producirá que tengamos que meter dentro del pantalón demasiada tela, con lo que el efecto no es el deseado y lo segundo que parezcamos que la camisa nos la prestó nuestro hermano de doce años. Un termino medio, será lo óptimo.
Lo mismo ocurre con las mangas, es mejor que no esten muy largas, por ejemplo cuando llevamos una chaqueta o saco si la manga es demasiado larga colgará mucho puño por fuera, mejor si solo se ven unos centímetros.
Recuerda que una camisa se puede arreglar, mejor llevarla adaptada a tu fisonomía que parecer un payaso. Esta es una prenda muy masculina, sensual y delicada. Con estos consejos solo queda abrocharla y lucirla perfecta y que mejor que una Camisa a Medida.
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Recuerda que una camisa se puede arreglar, mejor llevarla adaptada a tu fisonomía que parecer un payaso. Esta es una prenda muy masculina, sensual y delicada. Con estos consejos solo queda abrocharla y lucirla perfecta y que mejor que una Camisa a Medida.
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